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lunes, 10 de noviembre de 2008

XXI

A veces, hay tantas cosas que escribir que no se sabe por donde empezar. Hace más de una semana que explotó la bomba en la universidad, pero aún se notan sus efectos. Yo, al menos, sigo convaleciente de la intoxicación que sufrimos el miércoles pasado a causa de unos gases retenidos después del incendio (a causa, al parecer, de ciertas sustancias que había en la propia bomba).

No me gusta la política, ni mucho menos la prosa sin literatura, pero creo que por una vez voy a hacer una excepción para escribir sobre todo lo que he estado reflexionando. Algo va mal, rematadamente mal. No sé si es por la misma democracia que mató a Sócrates, o porque todavía no hemos aprendido a utilizarla bien. No hay un modelo ideal, pero están en nuestras manos mejorar en la medida de lo posible el que tenemos. No quiero decir que el terrorismo sea un error de la democracia, ni mucho menos. Pero sí que lo jóvenes de ahora dejamos pasar la vida sin darnos cuenta, entre televisión, ordenador, y juerga. No nos importa demasiado la política porque no tiene nada que aportarnos.

Y tal vez por eso tenga que explotar una bomba para recordarnos que la política no es simplemente ese juego de ideologías que se ha venido desarrollando en los últimos tiempos. Para los antiguos griegos, era la ciencia para organizar una buena sociedad, como lo es la ética para una buena vida. Cada época tiene sus movimientos y pensamiento propios, y los únicos capaces de crearlos y sacarlos adelante son aquellos que viven en esa misma época. Por eso, los jóvenes de ahora tenemos en nuestras manos cómo sea la sociedad del futuro. Nadie dijo que fuera fácil, o que se pudiera lograr la perfección. Lo que es seguro es que no podremos hacer nada tirados en el sillón.

Durante el último siglo, tal vez, algo más, dos grandes ideologías se han ido pasando la pelota de la sociedad, mal resumidas es derecha e izquierda. Cada una de ellas cumplió su función en su momento, buenas, y desvelaron sus horrores en sus extremos, ambos. Sin embargo, ahora sólo son dos idearios desfasados que sólo sirven para ser arrojados los unos contra los otros. Sus militantes se aferran a ellos como a un estandarte sin tener en cuenta que su lucha ya no vale su guerra.

La modernidad en la que se gestaron ha cambiado radicalmente, el mundo que conocemos nosotros no es el mismo de nuestros padres o abuelos, y en esta generación, esto es especialmente patente. Estamos en una época de crisis, no económica, sino ideológica, porque no hemos sabido adaptar los viejos modos de pensar a nuestra nueva dinámica de vida. Hemos perdido todos nuestros valores por el camino. (Tal vez por eso tienen en parte un nuevo sentido fenómenos como las tribus urbanas). Es necesaria una renovación, algo realmente nuevo que comience de cero y olvide por fin el viejo mundo bipolar. Una anideología. Sobre su contenido, aún queda mucho por andar, pero algo es seguro, es hora de levantarnos y recordar quiénes somos, y qué libertad tenemos derecho a soñar.

24 trazos:

Pedro Estudillo dijo...

La política no puede dejarnos de interesar, porque de ella depende nuestro futuro. Son los politicos los que han dejado de interesarnos, porque a su vez ellos han dejado de interesarse por la política. Ahora persiguen otros intereses.
En vuestras manos está el que eso cambie, porque podéis ser los políticos del futuro. Espero que al menos algunos os lo teméis en serio.
Gracias por tu visita y por haberme dado la oportunidad de conocer este espacio tan amplio e interesante que tienes.
Cuenta conmigo cuando quieras.
Un beso.

Unknown dijo...

Una gran reflexión, si señor.

Si los jóvenes de otras épocas viesen lo que ha sido de la juventud de hoy en día seguramente se rasgarían las vestiduras.

Muchos jóvenes de hoy viven de masticar lo que sus padres y abuelos masticaron sin preguntarse siquiera qué es lo que comen. No hacen suyas las virtudes de sus padres, pero tampoco tienen unas a las que considerar propias.

En nuestras manos está el zarandear cabezas y el abrir los ojos a la gente. No basta con ser buenos nosotros si no ayudamos a los demás a conseguirlo.

Prefiero tener ventanas a tener espejos.

OjosMiel. dijo...

El mero hecho de ir a clase al día siguiente fue todo un acto de valentía que merece ser reconocido.

Alicia. dijo...

Una buena reflexión.
En cierto modo, la política está en nuestras manos, y la mayoría no estamos interesados en ella. Porque como dice Pedro, hasta los políticos han dejado de interesarse por la política, y ahora les importa otro tipo de cosas.
No sabía que fueses a la universidad en la que explotó la bomba. ¡Ánimos! Y como dice r, el simple hecho de haber asistido a clase el día siguiente es muy valiente.
Gracias por pasarte por mi blog^^
un beso!

Anónimo dijo...

Qué cierto es todo lo que has dicho. Muchas veces siento envidia de la lucha de nuestros padres y abuelos que, aunque fue dura, iba a caballo de unas firmes convicciones y una gran fe en el cambio.
Nos lo dan todo demasiado masticado, lo tenemos todo muy fácil y eso nos hace ver las cosas borrosas (a los que queremos mirar).

Fuerza :)

Por cierto, la canción que tienes puesta en el blog de "O son do ar" me encanta, y hacía muchísimo que no la escuchaba.

Anónimo dijo...

Cuánta verdad y pensamiento tras esas palabras :)
muchas gracias por pasarte por mi blog, te pongo en mis enlaces, que yo también quiero seguir leyéndote.
En cuanto a la Filosofía..(L)
en cuento a la canción que tienes puesta..también (L)
en cuanto al blog...(L)

:)

R dijo...

Yo echo un cable a los políticos, porque, ¿Realmente merece la pena ponerse en el punto de mira, ya no sólo de la mafia etarra, sino de todas las infinitas críticas que te llueven de toda dirección, a cambio de otra cosa que no sea un firme ideal? No creo que -al menos unos cuantos- estén ahí por dinero.

Lo que sí hecho de menos de los políticos es su escasa capacidad dialéctica e instructiva: Ideologías aparte, escuchar a Felipe González me resulta placentero, porque siempre encuentro un punto de vista distinto que amplía el mio propio. Sin embargo, los políticos actuales apenas aportan nada, desde el 11-M se ha instalado la verborrea de "echar leña al fuego" y poco más: cuatro frases demagógicas para llenar telediarios.

Isabel Colette dijo...

Gracias a ti, Pedro, por devolverme la visita y por considerar este rinconcito un espacio amplio e interesante.

Coincido plenamente con todo lo que has dicho... simplemente no podemos dejarlo estar... No se si me agrada la idea de ser una política del futuro... sino más bien una ideóloga del futuro, creo que dejaré aplicar la casúistica a otros^^. En fin, eso ya es mucho adelantar, pasito a pasito con lo que tenemos delante, pero sin dejarnos sofronizar...

Isabel Colette dijo...

Parpadee, has dado en el calvo.

No está tomada al azar la imagen de '68. No es que simpatice ni de lejos, es lo que hay, con lo que proclamaron en esa revolución... Pero ojalá tuviéramos la mitad de su espíritu. ¿Qué hubieran hecho ellos si se hubiera puesto una bomba en una UNIVERSIDAD? Habrían salido a la calle, sin duda, no se habría olvidado en una semana, como ha ocurrido ahora.

Y después el asunto de las virtudes... Reivindicaron una libertad tal que no permitía ni la "opresión" de criterios morales de cualquier tipo... y ahora se revuelven hastiados de la sociedad, que tampoco ha sabido crearse otras virtudes (¿es eso posible?).

Hay mucho que zarandear... y no podemos hacerlo solos... sólo te suplico que me cuentes lo que ves por tus ventanas, porque yo no soy muy alta...

Isabel Colette dijo...

Mil gracias, R, por tu comentario... da ánimos para seguir adelante.

Y es un placer verte por aquí...

Isabel Colette dijo...

Gracias a ti, Alicia, me alegro de que te gustara mi reflexión...

Creo que debo aclarar algo: en mi entrada dije que no no me gustaba la política... y eso es sólo una media verdad. Es cierto, no me gusta la política, pero me fascina la "filosofía política". Tenemos ambas en nuestras manos, pero no haremos nada con la política si no revolucionamos antes la filosofía política. Así que, aunque la mayoría no estemos interesados en la política como tal, la filosofía es el lugar perfecto para cambiar la sociedad desde la raíz:la ética, la metafísica...

Gracias por los ánimos!

Isabel Colette dijo...

Gracias por todo lo que has dicho de mi blog, mi pensamiento, la música... ¡Me hacéis sonrojar! =^:^=

Trataré de hacer buen uso de esa fuerza que me deseas...

Realmente es eso lo que necesitamos, convicciones firmes y fe en que el cambio es posible (aunque yo misma sea bastante crítica con las convicciones en cuestión de nuestros padres y abuelos, visto lo visto). Así que me temo que tendré que crear mis propias convicciones... Bueno, en realidad está todo inventado, más bien tomar los ingredientes adecuados de aquí y allá. Con modificaciones. Ya veremos...

Porque el hecho de que nosotros lo tengamos todo hecho no quiere decir que sea así para todo el mundo...

Isabel Colette dijo...

Yay! Otra vez mil gracias por todo lo que has dicho... Y especialmente por enlazarme (también gracias en eso a Alicia).

Verdad, espero que la haya, pero lo que sí puedo asegurarte es q hay mucho pensamiento tras lo que habéis leído... Una reflexión de mucho tiempo, aunque haya aflorado por la bomba. Esto es solo... como una introducción.

Tengo muchas cosas en mente sobre esa renovación de la que he hablado... y todavía más, la mayoría, están sin concretar todavía, pero se van formando vagamente. Entre otras entradas más literarias, o simplemente reflexiones de otro tipo, iré exponiendo pequeños retales de este sistema, a medida que lo vaya concretando... No sólo en política, sino en filosofía en general. Tal vez algún día lo escriba (más extensamente).

Y os agradecería muchísimo que estuvierais ahí para ayudarme a reflexionar, corregir y repensar con vuestros comentarios... a la manera socrática.

Isabel Colette dijo...

Kaimpo, en realidad, no me refiero a ningún político en concreto, a aquí y ahora en España, por ejemplo. Sus motivos los conocerán ellos, yo no voy a juzgarles. Y más bien tiendo a hacer como tú, ante la duda pensar bien. ¿Mejor dialéctica? Por un lado estaría bien, por otro tal vez hasta sería peor que tuviesen la dialéctica adecuada para defender ideas (muchas) erróneas.

Me refiero a la sociedad en general, a nivel global, a nuestra época. Los políticos hacen lo que pueden con las herramientas que tienen. Pero esas herramientas han venido siempre de la filosofía. Antes dije que la elección de la imagen del '68 no fue casual... Tampoco lo ha sido la de Ghost in the Shell. De hecho, es aún más importante. Porque (fantasía épica aparte) nos muestra el cambio radical que está dando nuestra sociedad y que poco tiene que ver con lo que conocieron nuestros padres y abuelos. Me explayaría, pero creo que eso lo dejaré para otra entrada. Recomiendo el SAC 2GIG, para aquellos que les apetezca verlo para contextualizar la próxima entrega que será un pequeño análisis social. (Y porque es un anime extraordinario^^).

Pero tampoco os asustéis, no todo va a ser filosofía pura y dura, eh? Porque mi amor es el arte.

Raquel Cascales dijo...

Eres una revolucionaria y me encanta, pero empieza a revolucionar a los virus que viven contigo y a expulsarlos a todos. La revolución tiene que empezar por uno para extenderla al mundo entero.

Te espero pronto!

Jaime Nubiola dijo...

Todos esperamos con ilusión tu regreso a las aulas! Afectuosamente,

Jaime

Anónimo dijo...

"es hora de levantarnos y recordad quiénes somos, y qué libertad tenemos derecho a soñar" Me encanta esa frase, lo que significa, conlleva...

Ojalá, ojalá...


Un besote! ;)

Noelplebeyo dijo...

Interesante reflexión. Desde la caída soviética, el mundo bipolar se ha transformado en una visión del capitalismo salvaje, y ahora andamos cerca del infierno. ¿ Ponerse de pie y gritar ??? Desde aquí empezamos.

saludos y seguiré tus reflexiones

Isabel Colette dijo...

Raquel,
Espero pues, que pronto podamos vernos, la verdad...

Me ayudas con la revolución?

Isabel Colette dijo...

Jaime,

Muchísismas gracias, espero poder realizar esa ilusión pronto.

Isabel Colette dijo...

María,

Bienvenida a este pequeño espacio...

Verdaderamente, ojala... tengamos la fuerza de realizar nosotros mismos nuestros ojalá. Me alegro de que te haya gustado esa frase... Y todo lo que encierra.

Besos!

Isabel Colette dijo...

Noelplebeyo,

Me alegro mucho de que te hayan gustado mis reflexiones y vayas a seguirlas, bienvenido. Pero tal vez te sorprendas, no es tan sencillo como dices.

El capitalismo no es, ni de lejos, el único ogro de nuestra sociedad ni el peor. He dicho Re-no-va-ción, y va por todas las facciones. He dicho bipolar. Ahora, 2008.

En fin, pronto irás descubriendo lo que pienso al respecto... Espero que te guste tanto como lo que has leído hasta ahora.

Me encanta encontrar a alguien que sepa ponerse en pie y gritar.

Saludos!

Mondhell dijo...

No seamos tan radicales en el sentido de que "todo tiempo pasado fue mejor". ¿Qué es eso de que los jóvenes de hoy no luchamos como antes? Puede ser que hayamos dejado atrás la violencia, los gritos de guerra y el correr delante de un "madero", pero se sigue luchando. Gracias a la democracia se puede luchar a través de manifestaciones pacíficas, asociaciones y agrupaciones con objetivos, con la misma libertad de expresión que se nos ofrece en varios medios...El que no hace nada es porque no quiere.
Lo que puede pasar es que muchos jóvenes se han hecho cómodos. He escuchado muchas veces eso de: "No, si yo estoy por la causa, pero es que no me quiero meter" Pues para estar con la causa hay que "mojarse el culo".
Que no sólo están los de centro derecha-izquierda ni los extremos derecha-izquierda...También hay otros partidos que a veces deberíamos pararnos a leer que nos ofrecen.

Isabel Colette dijo...

Si pensara que todo tiempo pasado fue mejor, no querría seguir avanzando y cambiando, querida Mondhell.

Pero como bien has dicho, los jóvenes nos hemos hecho cómodos, y la derecha-izquierda y variantes ya no son una solución, hay que buscar alternativas. Lo que pasa es de momento no tienen mucho peso. Eso es parte de lo que pretendía denunciar con este post, (no quise hablar de ninguno en particular porque no estoy aquí para hacer campaña, sino hacer pensar, y además coincido con unos más y otros menos, pero tampoco plenamente con alguno).

Como ves, estamos de acuerdo. Un consejo de amiga: con algo de chocolate se ven muchas menos diferencias y le sale a uno hablar con más amabilidad.

Un beso!